jueves, 26 de mayo de 2011

Creo

Sospecho que le estas ahorrando
una hecatombe a mis sentidos,
que tu silencio es premonición
de una mirada seria,
que los pétalos de margarita han caído nones y
que intuyes que es mejor seguir así a poner
de nuevo las misas de angustia en mis labios,
que prefieres el silencio al arriesgue de la mil mentiras
que pudieran ser verdades y
que los proyectos que pudiendo ser sueños cumplidos
ya se han marchitado,
temo que nuestro cariño a nacido muertos
como mariposas que no llegaron a su termino,
que aunque solo viste poca piel de este cuerpo
no te apeteció en tus manos y
las venas de mis brazos te gustaron sin cortes,
sin dramas, sin navajas.

Déjate tormenta de mis sueños, déjate en mis manos,
yo sabré hacerme luz de luna, farola de la esquina,
pagina de un libro, metáfora de olvido, un día,
eternas noches y después, solo un recuerdo.

Gayo. 12.5.11 en una tarde en la que el calor hace estragos en mi nieve de limón.

Debimos

Debimos ser aves de papel en busca de su viento,
aves del paso a paso por el lecho,
papel escrito en el anverso,
la fotografía de lo que no ha pasado.
Debimos ser el verbo del entierro,
la palabra con la que se cierra el epitafio,
un suspiro,
un soplido,
no el aliento.
Debimos ser ave con alas de ceniza seca,
sólo sexo presto sin interrogantes,
sólo piel sin sentimientos,
un vaivén sin ritmo en las caderas,
un sacar agua cada quien para la muela en su molino.
Debimos ser materia muerta y seca.
Pero soy de piel y verbo y me aterro en el silencio,
en mis alas siempre queda una yesca
que se incendia cuando escucho
la sin razón de la ausencia de tu verbo.

Gayo.25.5.11 en una tarde en la que las alas de concreto se derriten de tanto calor, una tarde extrañando aquello que jamás existió.

Bla

Duerme y
con ello da por terminada la palabra,
cierra el pico, acribilla el mañana,
le pone fin a la homilía de la carne,
los besos y
los huesos.
En la estación de la cara oculta
de la almohada nunca se detiene el verbo,
el sueño se mantiene vivo el tiempo
que el esperma tarda en llorar de
nada,
de duda,
de ducha.
Duerme, el silencio ocultará lo hecho,
el acto morirá con el ocaso,
todo es lo mismo, bla,bla bla,
un infame equivoco.

Gayo. 21.5.11 desde el balcón de una madrugada recluido en la miseria de un silencio patrocinado por el alma.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Dedos

Las palmas de mis manos no los reconocen
cuando ansían las palmas de tus playas y
las buscan con las luces de los faros,
mis dedos se están enamorando
de esa piel de atardecer sin prisas,
de esas curvas de canela y
mascabado debajo de la espalda,
de ese andar sobre los sueños de uno
con tus piernas largas sin pisar los aleluyas,

mis dedos buscan misas y
reclaman a los cielos tus mejillas,
demandan de tus mares las agua sin prisa
que enjuaguen sus pecados,
suplican canela y
mascabado, piel de atardecer en cuna,
sólo dormir un rato, un instante,
una vida hasta que al tenerte para sí y
para no,
se vuelva viejo el horizonte.

Gayo. 11.4.11

martes, 10 de mayo de 2011

Olvidarte

Lo malo de que te hayas ido
no es en sí que hayas partido,
ni que entre uña y mugre se te haya
escondido la carne que sobre mi pecho
protegía el corazón que te latía,
lo malo no son las arcadas de ida
de los intestinos, ni las vueltas del dolor
con vomito de miel y hiel, o las carcajadas
del insomnio cuando se le trata de dormir
con un vaso de leche tibia, lo malo no es
que te hayas llevado el anillo quitapón
enredado en el dedo de los compromisos,
ni que en el afán de escuchar un si al deshojar
los pétalos de margaritas se me haya congelado
hasta la tierra , o que jamás me despertaras
por las noches con tu codo en mis costillas
para ponerme sobre aviso de que aquel que duerme
en soledad recibe al día siguiente de tu voz un buenos días,
lo malo, agua del deshielo de mis tempestades,
es que en tu prisa de salir de aquí sin raspones
ni heridas te llevaste entre los cascos la razón
que tiene el olvido para razonar cada partida,
la razón que en tu tiempo perdí para amarte y
que aún no se recobra para olvidarte..

Gayo.10 de mayo...

viernes, 6 de mayo de 2011

Palabra

Ya no es digna del aroma a miel y leche,
ni del sonido de la melodía huérfana de letra
que mis labios tarareaban al contacto de los tuyos
para contagiarte de palabra,
se nos murió por incendiarla
a leña seca en la hoguera y
no a fuego lento, por no calentarla
con la piedad del baño maría,
agonizó con la distancia,
con las eses de la carretera y
el sisear de la serpiente viva
en los cables del teléfono,
en la o del nudo de la cuerda
que se erigió en dogal, en horca,
en balcón para mirar de frente al patíbulo
como si fuera la puesta en escena de una obra ajena,
perdió su dignidad antes que la fuerza.
Los estertores le llegaron cual suspiros,
como gemidos de arrepentimiento,
cual sollozos sin laringe ni pulmones.

Se nos murió de ausencia terminal, amor, y
con ella todo lo posible, las reconciliaciones y
el derecho al visado en las garitas del recuerdo.


Gayo. 5.5.11 en una mañana sabiendo que dentro de unas horas será tarde, pero de ninguna manera una de mis tardes…

Nota 1. En ocasiones el valor consiste en enfrentarse cara a cara y sin mascara a los fantasmas propios, derrotarlos y bajarlos al plano de la realidad.

Nota 2. En ocasiones la realidad es tan “x” que parece un cuento de verdad.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Pretileando

Que triste debe ser
el deseo
que se duerme en cuna de zapatos
encerrado en el armario,
abrigado por las capas del polvo
de los días que se caminaron sin huella
como ser perdido,
junto a los besos de ojal en la solapa,
sin tallos,
ni pétalos,
sin puntos,
ni botón de flor ni buenas noches.

Que tristes deben ser las comas
que por un descuido
he dejado en el tintero junto al deseo
de carne y
hueso
junto al amor del buenos días y
los días que cansados de llegar
recargan la cabeza
sobre los codos
en el pretil de la ventana.

Gayo 4.5.11 en una tarde acompañada por desconocidos, añorando las tardes del local